23.6.09

DOÑANA EN UN MUNDO NUEVO



Al parecer, Doñana se muere. La marisma sólo ocupa ya la tercera parte de su extensión original y ha perdido entre el 60 y 80 por 100 de la vegetación dependiente del agua en poco más de 50 años. La sobreexplotación de aguas subterráneas para el cultivo de la fresa y la escasez de los aportes de agua (75 hm3/año por los 200 que WWF considera una mínimo imprescindible) han llevado a ADENA/WWF a publicar un informe en el que alerta sobre el problema y propone diversas medidas a seguir como la recuperación de la cuenca del Guadiamar y la reducción a la mitad de los cultivos de regadío.

Aunque no es nada nuevo, duele oirlo otra vez, y saber que estamos destrozando una de las joyas más importantes de nuestro patrimonio.

Visto a plazo de desertificación, el ejemplo de Doñana puede resultar muy ilustrativo de la teoría de que cualquier gobierno español democrático se ha pasado la protección de la naturaleza por el forro de la chaqueta. Doñana, que es un emblema de la protección del medio natural, no ha hecho más que menguar con cualquiera de ellos.

Pero ha menguado lentamente. No es un barco que se parte y vomita petróleo, ni un bosque quemado al fuego de una chuletada imprudente, que son los síntomas capaces de despertar la contestación pública. Doñana se muere y nosotros callamos, o abrimos nuevos debates sobre ecología que satisfagan al mismo tiempo nuestras ansias de ecología, progresismo y activismo político de sofá.

¿Se inundará el Mar Menor? ¿Se derretirán los polos y subirá el nivel de los océanos?

¿Qué podemos hacer para proteger el cemento?

Arduas cuestiones que se plantea un mundo nuevo que se ha olvidado del antiguo.


4 comentarios:

Haideé Iglesias dijo...

No hay mundo antiguo ni nuevo, son una continuidad a la que llegamos por las ideas, si esas que nos hacen sentirnos tan orgullosos y de las que presumimos tanto todos, necesidad afectiva, y cuando no se consigue esta se cubre con otras cosas, entre ellas el dinero, gran encubridor del miedo y el vacío, por lo que el cemento no es sino una consecuencia del comportamiento condicionado a través de lo vivido...

Pero, el mundo lo cambian las minorías activas. ¿Recuedas cuando en España por el aborto se iba a la cárcel, pero es enviaban a las hijas o ellas misma a escondidas a Londres? Muchos que tuvieron el valor de hablar claro, de decírselo a todos sin ocultarse, pagando cárcel y descrédito social. Pasaron !5 años, antes no tan sólo apoyaban poder abortar un ¿5%? después de que pasaron esos años lo aprobaban el 60%... así es como se mueve y así es como ha de ser, si no ocurre una hecatombe que nos hace tomar conciencia de nuestra fragilidad.
Hablar siempre fue muy fácil, lo difícil fue llevar a cabo las ideas a la práctica.
La mentalidad negativista, castatrofista, pesimista y criticista no ayuda en nada a aquello que se quiere cambiar. Como las noticias de la tv, prensa, radio, etc, nos dejan tan doloridos que acabamos cerrandonos por hipersensibilidad. Es una mala táctica hacer sentir culpable a las personas, así siempre se pondrán a la defensiva y se cerraran al cambio. Observate a ti mismo cuando te sientes atacado, o puesto contra la espada y la pared, ¿qué sientes? Nos queda mucho por aprender, cambiar significa aprender cosas nuevas, que producen ansiedad por lo general con lo que preferimos vivir comodamente, pero es un engaño, así pues como estamos de acuerdo que si cambio yo cambia el mundo, ¿qué esperas para acometer la lectura de ese libro? ¿qué esperas para transformar tu pensamiento negativo-pesimista en constructivo?
El estado depresivo, o melancólico es engañoso sobre todo porque es lo más común entre todos nosotros... siempre quejándonos y nunca haciendo lo suficiente, comenzando por uno mismo. ¿Qué podrás hacer tú para que mejorara? No critiques a los otros, mira dentro de ti; solemos proyectar en los otros lo que no queremos ver de nosotros mismos....
Quizá estoy siendo dura, pero te considero una persona inteligente que se ha dejado vencer por el pesimismo y no ve sino a través de ese cristal... cambia el color, quieres paz, se tu mismo paz. quieres que Doñana sea respetada, respétate a ti mismo...
No sé si me expliqué.
Un abrazo, lleno de energía positiva, que mis años de sufrimiento me costó aprender...

ismo dijo...

Lo de antiguo y nuevo es una forma de decir que nos ponemos a arreglar un problema sin haber resuelto el anterior. La protección de Doñana viene de largo, y el parque va para atrás. Para mí, simplemente, como decía, es una demostración de la escasa voluntad de los políticos por solucionar los problemas medioambientales y, si acaso, de la hipocresía de algunos grupos ecologistas.

No te entiendo demasiado bien, creo que prejuzgas determinados aspectos de mi personalidad y que es aventurado decir, por lo que me conoces, que no me respeto a mí mismo, que estoy depresivo o que la televisión me produce una especial hipersensibilidad.

Del positivismo sólo puede decir que me parece algo demasiado general como para hacer de ello una doctrina de vida. Todo tiene su momento, y yo no sobrevaloraría el poder transformador del positivismo. El positivismo fundamentado es cojonudo, el hueco es un camelo. No seré yo quien se trague ese anzuelo.

Haideé Iglesias dijo...

Y no, no me gusta decir la última palabra :)
¿A que te refieres cuándo hablas de positivismo? Así quizá comencemos a entendernos, si te apetece.

No prejuzgo, está en aquello que escribes y aquello que dibujas: el lenguaje no verbal (no digo el verbalizado fonéticamente), porque no sólo existe el lenguaje verbal y corporal (no verbal), también está todo lo demás, somos incapaces de dejar de comunicar; todo lo que hacemos habla de nosotros, y por supuesto lo que dejamos de hacer también, tan sólo hay que esta preparado para verlo...

Cuando hablaba de cerrarnos por hipersensibilidad no hablaba en exclusiva de tí...

Hubo muchas cosas del pasado que ahora ya han podido ser solucionadas, otras constará más, y otras no será posible, al fin y al cabo, mundo... Todo está para aprender: unos nada, otros un poco, otros un poco más, otros mucho, y luego están los que son las minorías activas que cambian en mundo por la sabiduría que les acompaña, siempre lo hubo y los habrá, y si hay pocos, por algo será, nadie fue capaz de arreglar el mundo el sólo, ¿o si?
En todo caso pudo hacer un poco, un granito de arena en medio del universo que es este planeta en medio de otro universo... La diversidad Ismo, la diversidad, dolorosa en ocasiones, pero necesaria como la hay en al propia naturaleza, ni más ni menos...

Si los políticos no son capaces de hacer, pues haremos nosotros, aquellos que queramos implicarnos en la vida, ¿o acaso con pedirles a ellos responsabilidades ya han desaparecido las nuestras? Cuanto menos dejemos en manos de los demás aquello que podemos hacer por nosotros mismos mejor ¿no te parece?

Y si te digo de leer el libro es porque entonces podrás comprender lo que te digo, cambio yo, cambia el mundo, y no es una frasecita tonta...los hechos comenzarán a demostrártelo...

Yo sueño Ismo, y mis sueños se cumplen, ¿por qué será?
Y hasta algo tan en apariencia imposible para muchos como encontrar aparcamiento cualquier día en una ciudad abarrotada... si, está ahí esperando por mi el hueco, ¿ es este el hueco al que te refieres? Jejeje...

Bueno, en serio, si quieres responder a la pregunta, estaré encantada de responderte que entiendo yo por positividad, que no positivismo.

El tono de mi voz es sosegado Ismo, no violento :)

Ah, y un abrazo, que antes se me pasó :)

ismo dijo...

Puede que tú hayas leido los signos, pero yo no me reconozco en tu descripción.

No sé por donde coger lo que me dices. A ver...

Minorías activas. Eso me mosquea. Las minorías activas no consiguen que nada cambie, salvo que se conviertan en mayorías activas, y, cuando lo hacen, se dejan algo en el camino (se dejan la minoría, claro está, y "datís", "decuestion").

Positivismo. Ya te decía yo que eso de hablar de positivismo era algo muy general. Yo creo que se puede mantener una actitud positiva en la vida sin que ello obste a mantener una actitud negativa frente a cuestiones concretas. Y vicevera. Y, como decía, intuyo que hay un positivismo con fundamento y otro que es hueco, absurdo para mí.

En cuanto a lo del libro, no lo descarto, pero mentiría si dijese que un libro de filosofía es mi primera opción. Ahora estoy entre una comparativa Napoleón-Wellington y una relectura de "El druida", de Morgan Lewelynn (o algo así), y creo que me está llamando la trilogía fundacional de Asimov. Además hoy he agotado mi presupuesto librero al comprarme "La isla negra", de Tintín, en tapa dura.